Información sobre EIDH para Empresas

Información sobre por qué y cuándo las empresas deberían encargar o realizar una EIDH.

Según los Principios Rectores de las Naciones Unidas, se espera que las empresas evalúen sus impactos (incluidos los derivados de las operaciones y las relaciones empresariales) mediante la debida diligencia en materia de derechos humanos. Las EIDH pueden proporcionar un proceso para que las empresas comprendan y aborden sus impactos en un proyecto, actividad o contexto de un país en específico.

Las EIDH de proyectos y actividades empresariales pueden proporcionar un enfoque estructurado para:

  • Identificar impactos adversos sobre los derechos humanos.
  • Determinar medidas para abordar cualquier impacto negativo sobre los derechos humanos identificado (a través de la prevención, mitigación y remediación)
  • Facilitar el diálogo entre empresas, titulares de derechos y otras partes relevantes (para obtener más información sobre las diferentes partes interesadas en participar en EIDH, consulte Participación de partes interesadas)
  • Facilitar el desarrollo de capacidades y aprendizaje para las partes interesadas de la empresa, los titulares de derechos y otras personas involucradas en la evaluación de impacto.
  • Mejorar la responsabilidad de las empresas.
  • Crear alianzas entre empresas, titulares de derechos y otras partes interesadas.

Para mayor información, ver sección A.4 del texto guía de Bienvenida e Introducción.

Las EIDH, los Principios Rectores de las Naciones Unidas y otras iniciativas de derechos humanos

The UN Guiding Principles on Business and Human Rights articulan la expectativa de que las empresas respeten los derechos humanos mediante la implementación de la debida diligencia en materia de derechos humanos. La debida diligencia de derechos humanos es un proceso para identificar, prevenir, mitigar y contabilizar los impactos adversos en derechos humanos en los que está involucrada una empresa. La evaluación de los impactos en derechos humanos es un paso crítico en este proceso, y las EIDH son una metodología que se puede utilizar para evaluar y abordar los impactos de los proyectos o actividades empresariales.

De acuerdo con las Líneas Directrices de la OCDE para Empresas Multinacionales, que son vinculantes para todos los Estados miembros de la OCDE, las empresas deben: respetar los derechos humanos, incluso abordando los impactos en los derechos humanos en los que están involucrados; evitar causar o contribuir impactos adversos a los derechos humanos; buscar formas de prevenir o mitigar los impactos vinculados a la empresa a través de una relación comercial; tener un compromiso político de respetar los derechos humanos; llevar a cabo la debida diligencia en materia de derechos humanos; y prever o cooperar en la remediación de impactos adversos en los derechos humanos. Muchos de estos elementos están integrados en esta guía y caja de herramientas de EIDH, además la OCDE reconoce a las EIDH como un método para identificar impactos reales y potenciales en los derechos humanos.

La Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible y sus Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) reconoce a las empresas como un importante impulsor del crecimiento económico, y apunta a "liberar el potencial transformador del sector privado". Respetar los derechos humanos en las actividades empresariales es inherente a muchos ODS, y la evaluación de impacto puede ser un paso clave que contribuya al cumplimiento de estos objetivos.

¿Cuándo deberían las empresas realizar una EIDH?

Las empresas pueden decidir realizar una EIDH por una amplia gama de razones basadas en requisitos legislativos y reglamentarios, su industria y los riesgos asociados, sus compromisos con los derechos humanos y / o su legado en torno a cuestiones relacionadas con los derechos humanos.

El desarrollo de “disparadores” para EIDH puede ser un buen método para permitir que el personal de empresas e instituciones financieras identifique proyectos o actividades donde una EIDH sería un enfoque útil.

Por ejemplo, las empresas pueden decidir encargar o llevar a cabo una EIDH:

  • Cuando un financista o inversor requiere la debida diligencia de derechos humanos como parte del contrato
  • Cuando los socios empresariales (por ejemplo, socios de empresas conjuntas) han estado involucrados en abusos contra los derechos humanos
  • Al ingresar a un nuevo contexto país con conocidos problemas en derechos humanos (por ejemplo, trabajo forzado, restricciones a la libertad de expresión o comportamiento violento por parte de las fuerzas de seguridad)
  • Cuando una ONG, OSC, grupo de derechos humanos u otro denunciante plantea inquietudes sobre los impactos en los derechos humanos derivados de los proyectos o actividades empresariales
  • Al comenzar un proyecto de alto impacto y alto riesgo (por ejemplo, una nueva mina, presa o gran proyecto de construcción)
  • Cuando el proyecto o las actividades están o estarán ubicados en tierras protegidas o áreas ocupadas por poblaciones vulnerables (por ejemplo, áreas cercanas a comunidades indígenas, selvas tropicales protegidas o campamentos de refugiados)
  • Cuando los mecanismos internos de identificación de riesgos marcan un sitio o proyecto para su posterior revisión e investigación
  • Cuando se está en riesgo de complicidad en abusos contra los derechos humanos (ver Fase 3: Análisis del Impacto)
  • Cuando el proyecto o las actividades empresariales afectarán los recursos de propiedad común utilizados por toda una comunidad (por ejemplo, aguas subterráneas, tierras de pastoreo o aguas de pesca); y
  • Al ingresar a un nuevo mercado o industria que puede poner en riesgo a los consumidores (por ejemplo, fórmula para lactantes)

La gravedad de los impactos reales o potenciales en los derechos humanos debería siempre guiar la toma de decisiones en proyectos que justifican una EIDH. Los proyectos o actividades empresariales con impactos de mayor gravedad (por ejemplo, amenazas a la vida y a los medios de subsistencia) deben recibir la máxima prioridad. Para obtener más información sobre la gravedad de los impactos, consulte la Fase 3: Análisis del Impacto.

Para una EIDH de proyectos y sitios, la evaluación debería realizarse lo antes posible en el ciclo del proyecto o en cuanto comiencen las actividades empresariales. La EIDH debe repetirse y reevaluarse a intervalos regulares y en momentos cruciales para el proyecto u otros cambios significativos en el contexto.

Para más información, consulte las secciones A.4.5 y A.4.6 del texto de Bienvenida e Introducción.

Información adicional

El texto completo de Bienvenida e Introducción proporciona más información sobre cada uno de los puntos planteados anteriormente. Este texto también incluye más información sobre:

  • ¿Por qué las empresas necesitan evaluar sus impactos en los derechos humanos?
  • Cómo se relaciona la EIDH con la debida diligencia de derechos humanos y los Principios Rectores de las Naciones Unidas
  • Las diferencias y similitudes entre EIDH y otros tipos de evaluación de impacto y de riesgo
  • Si las EIDH debe ser independiente o estar integradas con otras evaluaciones de impacto

Para información sobre las normas y los principios de derechos humanos, incluida la forma en que se relacionan con EIDH, haga clic aquí.

Para una introducción a la evaluación de impacto en los derechos humanos, incluida la diferencia entre una EIDH y otras formas de evaluación de impacto, haga clic aquí.

Para saber más sobre la participación de las partes interesadas en las EIDH, haga clic aquí.

Para volver a la página de inicio y explorar las diferentes fases de las EIDH, haga clic aquí.

Las empresas interesadas en trabajar con el Instituto Danés de Derechos Humanos, incluida la evaluación de impacto y la debida diligencia, pueden encontrar más información aquí.